EL BOTIQUÍN DE PRIMEROS AUXILIOS
Cada vez que preparamos la maleta para nuestra próxima aventura, existe un elemento indispensable que no puede faltarnos: el Botiquín de primeros auxilios adaptado a nuestro viaje.
Debemos tener presente que, cuando nos encontramos disfrutando de nuestras vacaciones, el país al que viajamos no disponga de las facilidades que tenemos nosotros para conseguir medicamentos, que los medicamentos reciban otro nombre, o que no disponga de un hospital en muchos kilómetros a la redonda. Es por ello que debemos llevar un botiquín que incluya, como mínimo, lo más básico que se puede necesitar en caso de padecer diarrea (también conocido como el mal del viajero), fiebre o un corte cualquiera. Debemos tener en cuenta qué tipo de viaje vamos a realizar y que país vamos a recorrer, ya que de esto dependerá si nuestro botiquín tiene ser más o menos completo.
Una de las primeras cuestiones que se deben considerar a la hora de preparar el botiquín de primeros auxilios para irnos de vacaciones es si padecemos una patología crónica, como diabetes o asma. Si este es el caso, deberemos llevar suministro suficiente del tratamiento para todo el viaje porque en el lugar de destino puede que no sea fácil localizar esos fármacos. Además, en estos casos es recomendable llevar con nosotros una copia de la receta médica.
¿Cuáles son los productos que no deben faltar en nuestro botiquín de viaje?
A continuación, os facilitamos una lista de sugerencias:
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Analgésicos y antiinflamatorios
Es probable que durante el viaje tengamos dolores o molestias generales como migraña o dolor muscular. El remedio básico son los analgésicos y antipiréticos, como el ibuprofeno o el paracetamol. Por lo general se administran por vía oral y surten efectos minutos después de su toma.
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Heridas
Por más que nos protegemos siempre podemos tener un pequeño susto o un corte, por dicha razón es recomendable tener un kit en nuestro botiquín de viaje para limpiar y proteger las heridas como apósitos, vendas o antisépticos. Son interesantes los puntos de sutura adhesivos, Steri-Strip®.
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Repelentes de insectos
Según el país donde viajemos es esencial protegernos de la multitud de insectos, debemos protegernos tanto para que no nos piquen como para salvaguardarnos de las futuras picaduras una vez ya nos han picado. Para ello es recomendable llevar repelente y calmantes (con amoniaco) así como antihistamínicos si somos de los que nos afectan las picaduras. En algunos países, sobre todo los que tienen clima tropical, es fácil encontrar repelentes que pueden ser más efectivos que los que encontramos en nuestro país, ya que están adaptados a sus necesidades extremas. Aún así, aunque decidamos comprar algún producto local, es mejor que llevemos ya uno desde casa por si acaso.
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Antidiarreico o Laxantes
El mal del viajero siempre nos ataca en el peor momento, no es recomendable el uso de este tipo de medicamentos, pero siempre vale la pena tenerlos a mano por si surge la necesidad imperiosa en días de largos trayectos o visitas intensas.
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Medicación para mareos y vómitos
Nunca se sabe lo que nos puede pasar en un viaje, ni como serán las carreteras de este país. Por ello, no nos podemos olvidar de incluir en nuestro botiquín unas pastillas para evitar los mareos.
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Antihistamínicos
En cualquier viaje siempre podemos tener la mala suerte que un alimento o una planta nos produzca una reacción alérgica por lo que recomendamos llevar algún antihistamínico para protegernos.
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Protección solar
Da igual que vayamos en invierno o en verano, el Sol siempre nos acompaña y puede ser muy traicionero, por eso es imprescindible una buena protección solar y no olvidarnos una crema hidratante por si ya es demasiado tarde y nos hemos quemado (aftersun).
Cabe recordar que tener una simple herida infectada según donde estemos viajando puede ser mucho más peligrosa que una herida más grave en un país como España. Con esto, no pretendemos asustar a nadie, sino concienciar al viajero para que tenga en cuenta que el botiquín para viajes debería ocupar un lugar prioritario en nuestra maleta, casi como lo sería acordarnos de coger el pasaporte.
Finalmente, comentar que la auto medicación no es aconsejable, pero en los casos donde la atención médica no está presente o simplemente no tenemos tiempo para recibirla, construir un buen botiquín es fundamental.
Consejo importante:
se recomienda no facturar medicamentos ni nada imprescindible, por si se retrasan o extravían las maletas. Es aconsejable llevarlos en el equipaje de mano, al menos los más básicos.