Angkor Wat, el templo matemático en Camboya

Camboya es un reino que nos cautiva y nos atrapa por su historia, en su época de plenitud llegó a gobernar gran parte del territorio que hoy es Laos, Tailandia o Vietnam. Pero si hay algún punto de este país donde descubrir la gran importancia que Camboya tuvo históricamente durante el imperio Jemer es en la región de Siem Reap, donde encontramos los grandes templos históricos del país. Sin duda, uno de ellos destaca sobre el resto: el templo de Angkor Wat, el cual se encuentra representado incluso en la bandera del país.

Angkor Wat es el templo religioso más grande del mundo declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1992, y aún hay muchos otros misterios que se esconden detrás de este templo.

Su nombre en lengua jemer (idioma oficial de Camboya) significa, literalmente, “templo de la ciudad”, pero este templo construido en el S. XII por el rey Suryavarman II originalmente no tenía este nombre y, lo más curioso de todo, es que hoy en día aún no sabemos el nombre con el que fue bautizado, un hecho sorprendente debido a la importancia que sigue teniendo hoy en día. Muchos historiadores dicen que este hecho es debido a la gran importancia del templo de Angkor en el momento de su construcción, que hacía que no fuera necesario darle un nombre específico ya que todos sabían de cual se trataba.

Angkor Wat está dedicado al dios hindú Vishnu, el “Protector”, uno de los tres dioses principales del panteón hindú (Shiva y Brahma son los otros). Si contemplamos el templo desde el aire, se puede ver claramente que se trata de la representación cosmológica hindú sobre la tierra.

En nuestros circuitos por Camboya cuando paseamos por Angkor Wat, tenemos tiempo para perdernos por todo el vasto terreno que ocupa este templo. Entre las curiosidades que podemos llegar a descubrir es que el número 108 tiene gran importancia. Empezando por sus 108 torres con la forma del capullo de loto o su escalera principal de 108 peldaños. Pero este dato curioso se vuelve habitual cuando hablamos de la cultura hindú, porque también podemos ver que este número cobra importancia en otros templos como el templo de Borobur en nuestros viajes por Indonesia.

Esta no es la única curiosidad matemática detrás de Angkor Wat, ya que sus medidas son muy precisas y fascinantes: los muros exteriores suman 365,24 metros, equivalente a lo que dura un año solar, mientras que la torre principal y el altar tienen la misma medida que la media de los días entre un equinoccio y un solsticio.

Aunque este haya sido el tema central de este artículo, en nuestro viaje a Camboya no nos podemos quedar sólo con una visita al templo de Angkor Wat. Solamente la ciudad de Angkor ya hay muchos otros templos que merecen una visita, como el templo de Bayón o el templo de Ta Prohn, que también ocultan grandes secretos y dejan a todo viajero que lo pise por primera vez con la boca abierta. Camboya es un país que merece ser visitado ya sea como una extensión junto con los países vecinos o como un viaje para conocer Camboya por si sola.

-M. Cardona

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